sábado, 1 de mayo de 2010


El fenomeno del cambio climatico se resenta en la vida de todos los individuos habitantes del suelo terrestre, o por lo menos de esta parte del globo en el cual sufrimos el hermoso clima no-tropical pero ya en proseso de cambio para peor, i guess.
La hermosa era de la mutacion climatica se hace presente en todos los aspectos de mi vida, ya que ademas de que mi salud suele ser perjudicada, se complican todas las decisiones basicas de mi vida. Lease, que un individuo que se levanta por la mañana, pongamole 7 am para ir a su trabajo u obligacion matinal, debe elegir un outfit que concuerde con la temperatura, la cantidad de posibilidades de la tormenta q puede aproximarse antes de que retorne a su hogar, de la humedad, tiene que pensar q probablemente a las 9 am de la mañana, el clima puede empeorar, puede hacer mucho mas frio y digamos segun mi experiencia la peor hora de frio es esa.
Ya habiendo pasado esa tortuosa decision, se dispone a empezar su dia con la mejor sonrisa, pero no termina aqui. Llegando a la esquina de su "obligacion matina" se da cuenta que el cielo lo engaño totalmente, ya que no parece aver ninguna tormenta acechando, pero decide dejar atras el tropieso y seguir.En el lugar fisico donde se desarrolla su "obligacion matinal" la temperatura asciende a los 30 grados, gracias al calor humano y al hermoso capricho de los mas "friolentos" de prender la calefaccion en un momento no deseado. Entonces, llega el momento que empieza con la camperita, despues sigue con el puloversito, despues con la pashmina, despues se saca las medias de nylon, y llega al punto que queda solo envuelto de la hermosa camiseta de dormir que tanto calor le da en sus largas noches de invierno, y no queda otra q tomar aire y resistir un hermoso largo rato de que la gota gorda se desliza por la cien como si fuera un litro de agua recien hervida para tomar un te.
Que feliz estaba, es la hora de salir!. Despues de ocuparse de no olvidar ninguno de todo el desfile de prendas que tubo q soportar en la espalda todo el dia, se dispone a salir pensando lo hermoso q estaba el dia cuando llego a la esquina esa misma mañana.
El panorama habia cambiado, el cielo estaba mas enojado que nunca, hasta el punto q era imposible visualizar la misma esquina de la mañana por la cortina de agua q caia del cielo; y ahi fue cuando se recrimino una y mil veces a si mismo el hecho de aver dejado el paraguas tranquilamente descanzando en el hall de entrada de su hermosa casa.
Mojado, empapado diria, mete la llave por la cerradura, ya presintiendo lo mal q iva a sentirse despues del baño y la taza de te calentita.
El tiempo ya paso, el dia se prendio fuego y quedaba solo el recuerdo de la lluvia pinchando su cara como si calleran alfileres del cielo. Siente los pies frios, y se dice a si mismo lo raro q esto es, sabiendo el hermoso clima templado q afuera ya se asomaba despues de la tormenta. Un pañuelo, eso necesito. Era obvio q ya no podia soportar mas cambios, y se debia interpretar de alguna manera. Fiebre, cataratas de moco, dolor de cuerpo, la cabeza a punto de explotar. Y que tire la primera piedra a quien nunca le ataco el cambio climatico.

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